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La moneda digital "está preparada para un repunte significativo", dice Albano.
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Un retroceso correctivo no invalidaría la tesis alcista.
Bitcoin (BTC) está captando la atención del mercado al superar un nivel técnico clave que podría impulsar un rally hacia máximos históricos de 176.000 dólares, según un análisis técnico Joe Albano.
El especialista señala en un informe que la reciente finalización de una fase correctiva abre la puerta a una nueva tendencia alcista, posicionando a la moneda como un activo destacado en el panorama.
Albano se fundamenta en la Teoría de la Onda de Elliott, un método que identifica patrones repetitivos en los movimientos de precios para predecir tendencias futuras.
Esta teoría divide los movimientos del mercado en cinco ondas impulsivas (que siguen la tendencia principal) y tres ondas correctivas (que van en contra de la tendencia). Es importante aclarar que esta teoría tiene entusiastas y detractores y no debería verse como una verdad absoluta.
Albano señala que la moneda continúa en su ciclo alcista, pero cuando llegue la quinta onda, podría marcar el fin de ese ciclo, tras lo cual podría llegar un mercado bajista que se extienda por uno o dos años.
Actualmente, bitcoin se encuentra consolidando una cuarta onda correctiva tras una tercera onda alcista significativa. En el siguiente nivel superior, esta es una vista de la tercera onda (naranja III) que precede a la consolidación de los últimos meses en la onda (naranja IV).

Esta consolidación, que comenzó tras los máximos de diciembre de 2024, ha preparado el escenario para un movimiento explosivo, dice el especialista.
“Una vez que se complete la onda IV, esperamos cinco ondas al alza que confirmen el inicio de la quinta onda”, detalla Albano. Su proyección más ambiciosa apunta a un precio de 176.000 dólares, un nivel basado en patrones técnicos y extensiones de Fibonacci.
Fibonacci y la “quinta truncada” son claves en el análisis
Para comprender el análisis de Albano, es crucial entender dos conceptos técnicos: los niveles de Fibonacci y la quinta onda truncada.
Los niveles de Fibonacci son herramientas matemáticas que identifican posibles zonas de soporte y resistencia, basadas en proporciones derivadas de la secuencia de Fibonacci (38,2%, 50%, 61,8%, etc.). En el caso de bitcoin, estos niveles ayudan a proyectar retrocesos y extensiones del precio.
Albano observa que la acción reciente del precio muestra cinco ondas al alza con extensiones de Fibonacci que validan su análisis.
Sin embargo, introduce un matiz. La posible presencia de una quinta onda truncada. Esto ocurre cuando la quinta onda de un patrón no logra formar un nuevo mínimo (en un movimiento bajista) o un nuevo máximo (en un movimiento alcista), lo que genera incertidumbre.
Si el análisis es preciso, dice Albano, la quinta onda truncada no debería afectar la proyección. Sin embargo, si el conteo es erróneo, este movimiento podría tratarse únicamente de un rebote temporal dentro de una fase correctiva, advierte.
En la parte inferior del siguiente gráfico, Albano anotó «Truncated 5th» (5ª truncada), indicando que el patrón previo no completó su movimiento descendente en la quinta onda final, ya que no logró formar un nuevo mínimo que confirmara el cierre del ciclo anterior.

“Todo a partir de ahí se basa en ello porque significa que estoy contando desde un bajo que no fue el bajo más bajo, pero que potencialmente fue el final del patrón, no obstante. Si tengo razón, entonces no debería haber problemas. Si estoy equivocado, el conteo a partir de ahí no es preciso, y esto podría ser otro rebote correctivo en progreso”, expresa Albano.
A pesar de esta incertidumbre, la acción del precio reciente reduce las probabilidades de un error. Bitcoin ha mostrado un patrón de cinco ondas al alza, lo que refuerza la hipótesis de que la quinta onda está en marcha. Este movimiento, según Albano, podría llevar el precio a niveles significativamente más altos.
La configuración 1-2: una oportunidad de alto potencial
Un elemento central del análisis es la configuración 1-2 de la teoría de las ondas de Elliott, que Albano describe como “la más limpia, menos riesgosa y de mayor recompensa”.
Esta configuración ocurre al inicio de una nueva tendencia alcista, donde la onda 1 marca el primer impulso y la onda 2 es un retroceso correctivo.
Actualmente, bitcoin estaría formando la onda 2 de esta configuración, con un nivel crítico de invalidación en 74.550 dólares. Si el precio cae por debajo de este nivel, la proyección alcista quedaría anulada.
Para que la onda círculo 2 sea válida, Albano espera un retroceso correctivo de tres ondas (A-B-C), en lugar de un movimiento impulsivo de cinco ondas.

Esta zona, representada en un recuadro verde en el gráfico, se sitúa entre los 80.000 y 90.000 dólares. “Si el retroceso se desarrolla como espero, confirmará la onda 2 y abrirá la puerta a un rally hacia los 176.000 dólares”, explica.
La proyección de Albano se basa en extensiones típicas de Fibonacci para las ondas 3, 4 y 5. En particular, la onda 3 suele extenderse hasta el 161,8% o 176,8% de la onda 1, aunque bitcoin ha mostrado en el pasado extensiones más agresivas, cercanas al 200%.
Para mantenerse conservador, Albano proyecta que la onda 5 culminará justo por encima de los 176.000 dólares, un nivel que podría alcanzarse entre el otoño de 2025 (septiembre-octubre) y finales de año.
Riesgos y precauciones en el horizonte
Aunque el análisis de Albano es optimista, no está exento de riesgos. Uno de los principales es que la onda 1 aún podría extenderse, lo que desplazaría los objetivos de precio hacia arriba, pero manteniendo los mismos principios técnicos.
Otro riesgo es un retroceso muy superficial en la onda 2, que no alcance el nivel de retroceso del 38,2%, lo que podría desencadenar un rally sin una confirmación clara.

Este gráfico ilustra el rango donde el retroceso de la onda círculo 2 debería ocurrir, destacando el riesgo de un movimiento superficial que no llegue al nivel del 38,2%, así como el punto crítico de invalidación alrededor de 74.550 dólares.
Un riesgo adicional, y más fundamental, radica en la propia base del análisis de Albano: la Teoría de la Onda de Elliott. Este marco, aunque popular entre algunos traders, es subjetivo, ya que su éxito depende en gran medida de la interpretación del analista.
La teoría se basa en supuestos sobre el comportamiento de la psicología de masas, como niveles donde los inversionistas tienden a tomar ganancias o patrones que reflejan el sentimiento del mercado. Sin embargo, estas premisas carecen de evidencia irrefutable, ya que no existe un motivo comprobable para que estos patrones se cumplan siempre, lo que introduce un grado de incertidumbre en cualquier pronóstico basado en esta metodología.
En mercados volátiles como el de las criptomonedas, donde factores externos como noticias o regulaciones pueden alterar los patrones esperados, la teoría podría no predecir con precisión los movimientos del precio, por lo que no se pueden dar por hecho las proyecciones de Albano.
Otros analistas respaldan la tendencia alcista
Las proyecciones de Albano no son un caso aislado. David Zanoni, inversionista y analista, coincide en que bitcoin está entrando en una fase parabólica, caracterizada por una aceleración pronunciada del precio, como lo reportó CriptoNoticias.
Según Zanoni, todos los ciclos de bitcoin han culminado en esta fase, que históricamente dura unos seis meses. Si el ciclo actual sigue este patrón, la fase parabólica comenzaría en abril de 2025 y se extendería hasta septiembre u octubre, con un precio objetivo de 150.000 dólares.
Otro analista, Mike Fay, utiliza el Indicador de Tope del Ciclo Pi, que combina la media móvil de 111 días con un múltiplo de 2x sobre la media móvil de 350 días. Este indicador sitúa el tope del ciclo actual en 157.000 dólares, un nivel cercano a las proyecciones de Zanoni y ligeramente más conservador que el de Albano.
La convergencia de estas proyecciones refuerza la idea de que bitcoin está en camino a un rally significativo.
Factores macroeconómicos y adopción institucional
Más allá de los indicadores técnicos, el impulso de bitcoin está respaldado por factores fundamentales. La incertidumbre macroeconómica, incluyendo la inflación y las políticas monetarias expansivas, ha llevado a inversionistas a buscar refugio en la moneda digital.
Bitcoin, con su oferta limitada de 21 millones de monedas, se posiciona como una opción atractiva frente a monedas fíat sujetas a devaluación.
Simultáneamente, la adopción institucional ha alcanzado niveles sin precedentes. Grandes empresas, fondos de cobertura y bancos de inversión han incorporado bitcoin a sus portafolios. Esta tendencia fortalece la demanda y respalda las proyecciones alcistas.
Sin embargo, bitcoin no es inmune a los factores macroeconómicos, aunque su sensibilidad ha disminuido con el tiempo. Eventos como la guerra de aranceles de Estados Unidos, que llevó el precio a 74.000 dólares, o la aprobación de los ETF de BTC en enero de 2024, que impulsó su valor, demuestran que factores políticos y sociales pueden mover el precio, a veces alineándose con las acciones y otras en dirección opuesta.
¿Qué esperar en los próximos meses?
El análisis técnico y fundamental sugiere que bitcoin podría estar al borde de un rally histórico, con precios objetivo entre 150.000 y 176.000 dólares para octubre de 2025.
Sin embargo, los inversionistas deben proceder con cautela. La configuración técnica, aunque prometedora, depende de la confirmación de patrones específicos. Albano enfatiza la importancia de la gestión del riesgo: “Deja que la configuración se desarrolle y utiliza los niveles de stop loss para proteger tu capital”.
Con la combinación de indicadores técnicos, respaldo fundamental y el consenso entre analistas, bitcoin se perfila como un activo a seguir de cerca en los próximos meses. Si la historia se repite, la fase parabólica podría marcar un hito en la evolución de la moneda.