Hechos clave:
-
Según el presidente, «el Estado es una máquina de impedir la generación de riqueza».
-
En línea con esas ideas, Milei firmó un decreto de desregulación de la economía.
En la política argentina contemporánea, pocas figuras han generado tanto debate como Javier Milei, el actual presidente de la Nación. Conocido por su retórica apasionada y su firme creencia en el liberalismo económico, Milei representa una ruptura con las políticas tradicionales del país. Eso pudo verse hoy, 20 de diciembre, en un mensaje que dio a través de la Cadena Nacional de Radio y Televisión. En su discurso pronunció duras palabras sobre el colectivismo y defendió las ideas liberales.
«Hoy es un día histórico», fue la frase que utilizó el mandatario para comenzar su presentación de las «Bases para la Reconstrucción de la Economía Argentina». Prosiguió: «Después de décadas de fracasos, empobrecimiento, decadencia y anomia, hoy comenzamos el camino de la reconstrucción».
A modo de introducción, Milei le dedicó algunas palabras a las ideas de izquierda o socialistas, a las que cataloga como «colectivismo». El presidente aseguró que esas doctrinas políticas y económicas, que muchos han querido aplicar en Argentina, «son las mismas que fracasaron a lo largo y ancho del planeta».
«Esas ideas, donde se intentaron, han sido un fracaso en lo económico, social, cultural y le costaron la vida a millones de seres humanos. Esa doctrina que catalogamos como colectivismo es una forma de pensamiento que diluye al individuo en favor del poder del Estado. Es una doctrina que parte de la premisa de que la razón del Estado es más importante que los individuos».
Javier Milei, presidente de Argentina.
El libertario no frenó ahí su verborragia anticolectivista. Siguió calificándolo como «una doctrina que parte de la idea de que un grupo de burócratas pueden manejar la vida de millones de seres humanos y que considera que los políticos son omniscientes, omnipresentes y omnipotentes». Sobre esa deificación de lo que Milei denomina «la casta política», aseguró: «Los políticos no son Dios sino que son la causa de nuestros problemas, porque durante décadas defendieron estas ideas empobrecedoras mientras ellos se hacían más ricos».
Como consecuencia de la implementación de ideas colectivistas en Argentina —explicó el presidente—, la población «ha tomado como normales las intromisiones estatales». Para este economista de 53 años, adherente a la corriente denominada Escuela Austríaca, «un aspecto central del fracaso de Argentina es la injerencia del Estado en la vida de los ciudadanos». Detalla: «nadie puede trabajar, comerciar, circular o educarse sin el permiso de los políticos» y eso, dice, «es una clara oposición a la Constitución liberal».
Javier Milei prosiguió hablando sobre las soluciones que los políticos han intentado en el último siglo para los problemas argentinos: endeudarse, emitir moneda, o subir impuestos. Como consecuencia —dijo Milei—, «Argentina es el máximo defaulteador serial del mundo y tiene la presión impositiva en blanco más alta del mundo».
«El problema es el déficit. Y las soluciones de los políticos lo empeoran. La emisión monetaria es la única causa de la inflación. Es un impuesto regresivo encubierto que entorpece las señales de precios y destruye la inversión. El aumento indiscriminado de impuestos atenta contra el poder adquisitivo de los argentinos. Los políticos, en vez de afrontar la causa (el déficit fiscal), introducen regulaciones, cepos y controles de precios que destruyen la generación de riqueza. El Estado se ha vuelto una máquina de impedir el comercio, el trabajo, la generación de riqueza, el crecimiento económico y la libertad».
Javier Milei, presidente de Argentina.
Acto seguido, Milei detalló —tal como lo hiciera en su discurso inaugural que fue reportado por CriptoNoticias— la situación crítica de Argentina. Mencionó, entre otras cosas, que cerca del 50% de la población está bajo la línea de pobreza y que «6 de cada 10 chicos de entre 0 y 14 años son pobres».
«Hoy damos el primer paso para terminar el modelo de la decadencia»
Esta perspectiva filosófica se traduce en un conjunto de políticas concretas que Milei ha comenzado a implementar, con el objetivo de reducir la influencia del Estado en la economía y en la vida cotidiana de los argentinos.
El presidente confirmó que hoy, 20 de diciembre, ha firmado un decreto «para desarmar este modelo opresor que destruye a nuestro país». Detalló que el modelo económico que promueve su gobierno «ataca el déficit y no las consecuencias del mismo». Y la base de ese cambio es «destrabar todas las regulaciones que solo generan problemas».
En línea con su crítica al colectivismo, el decreto (que estará publicado mañana en el Boletín Oficial de la República Argentina) contiene alrededor de 300 desregulaciones y derogaciones de leyes actualmente en vigencia. En su discurso, Milei mencionó algunas de ellas, por ejemplo, la ley de alquileres, la ley de góndolas y la ley de «compre nacional».
También, adelantó que habrá una reforma del código aduanero para abrir importaciones y exportaciones; que se buscará privatizar empresas estatales; que se modificará el Código Civil para que las deudas pactadas en moneda extranjera deban ser canceladas en esa moneda; y que se desregularán los servicios de Internet (esto permitiría la llegada de empresas de Internet satelital, como Starlink).
Algunas de esas modificaciones podrían impactar directamente en el ecosistema de bitcoin (BTC). Por ejemplo, la apertura de importaciones beneficiaría a quienes quieran comprar desde Argentina equipos de minería, hardware wallets o nodos.
También, la llegada de Starlink, con su Internet satelital menos propenso a la censura y caída de servicio o áreas sin cobertura, podría servir para que cualquiera envíe BTC o tenga su nodo en cualquier parte de Argentina.
Aunque Milei no hizo ninguna referencia bitcoiner en su discurso, se percibe que la ideología subyacente es la misma que impulsó la creación de Bitcoin: mantener al Estado lo más alejado posible de las actividades de los individuos (en el caso de bitcoin, separar al dinero del Estado).
A modo de conclusión, el mandatario hizo un pronóstico esperanzador:
«Si avanzamos en este camino con decisión y contundencia, nuestro país volverá a la senda del crecimiento y progreso que alguna vez supimos transitar».
Javier Milei, presidente de Argentina.
Se convoca al Congreso a sesiones extraordinarias
Al término del discurso, un comunicado de la Oficina del Presidente anunció que —tal como Milei lo mencionara en su mensaje— se convoca a diputados y senadores a sesiones extraordinarias en el Congreso Nacional. El objetivo es discutir un paquete de leyes que permita avanzar en mayor medida con las reformas propuestas.
Ese comunicado termina con una exhortación a los representantes electos:
«Los diputados y senadores de la Nación deberán enfrentar la responsabilidad histórica de elegir entre ser parte de este cambio u obstruir el proyecto de reformas más ambicioso de los últimos 40 años, que permitirán poner en marcha a las fuerzas productivas y comenzar a transitar el camino para volver a ser una potencia mundial».
Oficina del Presidente de la República Argentina.
En este crucial punto de inflexión, las iniciativas de Milei no solo encapsulan su rechazo al colectivismo y su compromiso con la libertad individual, sino que también señalan una transformación profunda y potencialmente histórica en el rumbo político y económico de Argentina.
Actualización 20/12/2023, 22: 42 PM (hora argentina): se añade mención a cómo las modificaciones legislativas anunciadas por el presidente de Argentina podrían impactar en el ecosistema en torno a bitcoin.
