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Para Andragnes, la relevancia geopolítica de Bitcoin va a tener una especie de explosión.
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La ONG Bitcoin Argentina prepara una propuesta de cambio al registro de PSAV.
CriptoNoticias conversó en una entrevista exclusiva con el creador de LABITCONF, Rodolfo Andragnes, durante la edición 2024 de este evento llamada «Restart».
LABITCONF es una conferencia latinoamericana de bitcoin que se realiza año a año desde 2013, ofreciendo charlas de referentes del ecosistema. Este 1 y 2 de noviembre se consagró su 12° edición en Costa Salguero, Buenos Aires, con la presencia de más de 10.000 asistentes.
Andragnes no solo es el fundador de LABITCONF, sino también de la ONG Bitcoin Argentina, una organización sin fines de lucro que promueve el desarrollo de las tecnologías descentralizadas como Bitcoin desde hace más de diez años en su país. Bajo tal misión, este espacio lleva adelante variadas acciones como educación y asesoramiento a reguladores.
Con su trayectoria en el ecosistema, Andragnes se ha convertido en una figura reconocida del sector, especialista sobre todo de la situación en Argentina. Es por ello que pudimos hablar con él sobre múltiples temas, incluyendo su opinión sobre nuevas regulaciones a la industria en el país y el futuro de la adopción global de bitcoin.
Para empezar, noto que hay varios políticos en el evento, algo que no se veía tanto en ediciones pasadas. ¿A qué se debe eso?
LABITCONF viene creciendo, viene posicionándose… Es el tercer año en Argentina. Creo que eso genera cierto reconocimiento de la relevancia que tiene. Ha sido, creo, el evento más grande también de la Tec Week.
Quizás me quedé con ganas de que participe el Poder Ejecutivo más alto. Lo invitamos a Milei, lo invitamos a Sturzenegger. Esto no ha sucedido, pero estoy muy contento de que vengan los que están trabajando cooperativamente en el cambio, en este restart.
Que este año haya políticos, en realidad, es una decisión nuestra también, porque este año la conferencia se llama Restart, que es esta propuesta de cambio. Y yo consideré que holísticamente el restart abarcaba también lo que está haciendo Argentina. Entonces, un poco viene por esa razón también, de nuestra proactividad de tratar de convocarlos.
Estamos viendo también que cada vez más políticos se están involucrando en la industria y en el mercado. Por ejemplo, Trump dijo que quiere tener reservas nacionales en bitcoin si gana las elecciones. ¿Crees que esa es una medida que deberían tomar otros presidentes también?
Mirá… la razón principal por la que armo esta conferencia (y a pesar de ser una conferencia de Bitcoin, es la primera vez que en el main stage tengo como 6-7 charlas seguidas sobre que es el momento de bitcoin y el mejor activo), es porque creo que justamente, a partir de este año, Bitcoin pasa a tener un rol estratégico, institucional y político muy superior a lo que se venía viviendo. Y creo que vamos a ver una especie de explosión respecto a la relevancia geopolítica de Bitcoin.
Entonces, esa es la razón por la cual quería convocar políticos también. Me parece bien indispensable que empiecen a percibir esta realidad que se está dando en el mundo y que Argentina, por la misma razón que lo arranqué en el 2013, no se quede atrás, que no crea que hay que esperar a ver qué hacen los demás para hacer, sino que tomen el toro por las astas, que se suban al toro y que adopten esto, que es un hecho.
No hay una duda ya de si esto va a pasar. Es solo una cuestión de tiempo. Si más tiempo esperamos, más tarde vamos a estar.
Hace poco salió en Argentina la reglamentación para los proveedores de servicios de activos virtuales (PSAV) de la Comisión Nacional de Valores (CNV), abierta a consulta pública. ¿Cómo ves esa regulación? ¿Crees que se deberían modificar algunos términos o te parece que está bien?
Bueno, acá te puedo dar una respuesta desde la ONG, no solo mía, porque esto lo analizamos desde la ONG. Hay varias cuestiones que no nos cierran de esa propuesta. Estamos desarrollando una propuesta concreta de cambio.
Ya desde el principio, antes de que naciera esto, consideramos que no era necesario que la CNV fuera parte de este proceso, que alcanzaba con un registro en la Unidad de Información Financiera (UIF).
Existiendo la CNV, creemos que primero sigue no entendiéndose la diferencia entre bitcoin y el resto de las criptomonedas (si es todo lo mismo, lo cual no lo es). El tema de la autocustodia no está promovido, no está definido como uno de los derechos del individuo, no está bien hecho. Convierten como PSAV a una billetera, cuando las billeteras no son de ninguna forma un PSAV. Es como decir que la caja fuerte es un PSAV o es un banco, pero la caja fuerte es una caja fuerte.
Entonces, creo que hay mucha incomprensión todavía. Por más de que se ha trabajado con una parte del ecosistema empresario, lo han visto desde una mirada meramente empresaria y no de una mirada del individuo. Y la ONG de alguna forma defiende los intereses y los derechos de los individuos, desde una mirada del individuo.
Creo que le falta mucho. Creo que hay mucho por cambiar, si es que tuviese que prosperar el proyecto de la CNV, que para nosotros podría no prosperar.
¿Creés además que de alguna forma va en contra de la innovación o ahuyenta a los exchanges del país?
La innovación nunca necesitó de la regulación. La innovación existe fuera de la regulación. Justamente Bitcoin nació fuera de la regulación. Y, es más, muchas veces nace compitiendo contra el status quo y esa es la innovación. Es cambiar de lo que se venía haciendo, por lo cual de ninguna forma siento que esto tenga que promover la innovación.
Siento que el no preservar y el no defender la descentralización cohíben parte de la innovación que se ha dado en este espacio. Todo lo que tenemos hoy, el mero hecho de que existe una CDBC, es porque antes hubo una innovación sobre hacer descentralizadamente las cosas. El concepto de la blockchain nace de la descentralización, entonces ahora “debe regularse” cada uno de los activos que están ahí.
Entonces la realidad, en lo personal, creo que la regulación genera adopción en algún punto, genera que la gente se sienta cómoda y más confiada de lo que está haciendo y protegida. Pero, también genera una menor conciencia de en lo que uno se está metiendo porque igual “está defendido y protegido”.
Creo que la regulación es positiva en algún punto desde la adopción, pero a esa adopción le falta también un proceso que es necesario que lo atraviese. Y en el ámbito regulado que veníamos muy bien trabajando regularmente (presentando informes, generando cosas en forma autorregulada), creo que mucho de eso se daba. Al menos la gente tenía la responsabilidad de entender en lo que se estaba metiendo.
¿Y el sandbox de tokenización de real world assets (RWA) y de securities qué te parece? ¿Cómo lo ves?
Los sandboxs siempre me parecen un experimento simpático… nunca he visto que terminen en algo útil… Pero, me parece que es un experimento interesante si es que desde el lado del Estado aceptan las innovaciones que surgen desde el sandbox y no queda en una creencia de que lo que funciona en el sandbox funciona afuera.
Porque el sandbox es un espacio contenido, de hasta 5-10 mil personas y estamos todos divertidos (“¡ay, ¡qué lindo, mira qué bien que funciona!”), pero cuando empezamos a pensar “che, ¿y esto lo podrían usar 3 millones de personas?” vemos que “ah, no, pero espérame; compite con A, compite con B, compite con C”.
Entonces, en la mirada del sandbox, mientras no sea un playground para venir a mostrar que estamos innovando y sea con una mirada de “te dejo venir a desarrollar soluciones que puedan servir para todos”, entonces sí [puede funcionar]. Generalmente, en otros países no lo he visto así.
¿Cómo conviven este tipo de regulaciones con la idea de desregular que promulga Milei? ¿No es un poco contradictorio?
Sí, yo tengo un poco la sensación de que esto pasa independientemente de la línea de Milei. Es como que me imagino, quiero imaginarme, que si Milei pusiera la mirada en este espacio, si Sturzenegger pusiera la mirada en este espacio, diría “pará, desregulemos esto”. Es lo que uno se esperaría en este espacio. Entonces, como tengo esa fantasía, me imagino que no lo miran.
Hoy en las reuniones tuvimos muchos políticos como dijiste, preguntamos si en la Cámara de Diputados alguna vez se habla [del ecosistema] y dijeron que nunca jamás se nombra bitcoin. Entonces, yo creo que simplemente no está en la mirada de ellos y está pasando lo que ya venía de antes, porque lo de la CNV venía trabajado desde antes del gobierno actual.
Ojalá dediquen más cabeza. Ojalá este espacio y este evento les permita entender eso. Hay 250 charlas, hay 11.000 personas anotadas… Es una locura de cosas que hay que entender y de interés que hay en el tema.
Entonces, ojalá el gobierno también le ponga la cabeza y no la ponga para frenarlo, sino que la ponga para liberarlo, para abrazarlo y para entender que hay un potencial a través de esto, de crecimiento y de posicionamiento estratégico global.
Hablando del mercado, la última semana bitcoin se acercó a su máximo histórico y esta semana tenemos decisión de tasas de interés y las elecciones presidenciales en Estados Unidos. ¿Cómo crees que puede reaccionar el mercado ante un triunfo de Trump o Harris?
Mi sensación es que va a reaccionar positivamente. Igual el precio no me importa demasiado. No es una cosa que digo “ay sí, qué suerte, pasó a USD 80.000, a USD 90.000…”. Creo que puede pasar ante un eventual triunfo y ante la baja de tasas presupuesta de 25 puntos. La verdad voy a decir una palabra: me ne frega.
¿Cuándo crees que va a ser el pico de bitcoin en este ciclo y a qué precio, si te animás a decir algo?
La verdad, como no hago análisis técnico, te digo un número que me guste: USD 237.324.