-
La red Bitcoin muestra transacciones provenientes de Bitfinex y Binance.
-
Bukele no ha tuiteado sobre Bitcoin desde el 30 de enero de 2025.
La Teorรญa de la Doble Verdad, errรณneamente atribuida a Averroes y sus seguidores, postula que pueden coexistir dos afirmaciones contradictorias, una alcanzada por medio de la razรณn y otra revelada por la fe, siendo ambas verdaderas en sus respectivos รกmbitos.
Esta falsa teorรญa, caricatura con que teรณlogos escolรกsticos del siglo XIII como รtienne Tempier atacaban a los averroรญstas, parece estar resurgiendo en el pensamiento econรณmico contemporรกneo, especรญficamente en la administraciรณn del autodenominado Rey Filรณsofo, Nayib Bukele.
Segรบn el Fondo Monetario Internacional (FMI), El Salvador cumple con su acuerdo de no comprar mรกs BTC, exigido en las condiciones del organismo multilateral para desembolsar un prรฉstamo de 1.400 millones de dรณlares al paรญs. Esto fue ratificado por el presidente del Banco Central de Reserva de El Salvador, Douglas Rodrรญguez, y el ministro de Hacienda, Jerson Posada, en una carta al FMI que reportรณ CriptoNoticias.
Pero la Oficina Nacional del Bitcoin sigue publicando diariamente su respectivo panfleto propagandรญstico, afirmando que โEl Salvador comprรณ mรกs Bitcoinโ, utilizando datos on-chain para respaldarlo.
Esta informaciรณn es confirmable directamente en sitios de anรกlisis de cadena como Arkham, donde se muestran transferencias diarias desde los exchanges Binance y Bitfinex, empresa que ha tenido nexos cercanos con El Salvador, en tanto que servirรญa para la emisiรณn de los todavรญa esperados Bonos Volcรกn.
ยฟCรณmo es posible, entonces, que convivan ambas verdades? ยฟNo rompe esto el principio lรณgico de no contradicciรณn? ยฟPuede coexistir la fe en la palabra sacrosanta del FMI y de los funcionarios salvadoreรฑos, en el mismo plano ontolรณgico que la verdad verificable por la razรณn mediante la contabilidad de Bitcoin? Sรญ, porque vemos una transparente opacidad.
La contabilidad de Bitcoin es una fuente de verdad como pocas en el mundo contemporรกneo. En estos tiempos de posverdad, donde es casi imposible saber si algo es cierto o creado por una inteligencia artificial, la red Bitcoin, diseรฑada con una mentalidad adversarial y de desconfianza, en la que miles de nodos verifican el cumplimiento de las reglas y en la que el poder de minado hace prohibitivo modificar la informaciรณn registrada, es un oasis en un desierto de mentiras.
Es por esto que, en marzo de 2024, cuando El Salvador revelรณ esta direcciรณn, lo consideramos un hito de transparencia y auditabilidad inรฉdito en la historia. Cualquier persona, desde cualquier lugar del mundo, puede conocer los movimientos de fondos que se realicen hacia y desde esta direcciรณn, e indagar en su naturaleza y las conexiones con los entes con quienes se realicen esos movimientos. Y asรญ ha sido.
Sin embargo, la red Bitcoin, como toda red de criptomonedas, es un sistema cerrado. No tiene forma de saber nada sobre informaciรณn externa a su red. Y eso es exactamente lo que sucede con las transacciones provenientes de Binance y Bitfinex.
Las transacciones internas en los exchanges no se liquidan en la red hasta que se retira el dinero; solo se registran en las contabilidades privadas de los exchanges y en los balances de sus usuarios. En tanto que esta informaciรณn no es pรบblica ni accesible, nada podemos saber sobre ella.
Ante este lรญmite para el conocimiento, solo tenemos transparencia de los bitcoin on chain. En marzo de 2024, Bukele afirmรณ que la direcciรณn revelada representaba โuna porciรณnโ de sus BTC. El Salvador bien pudiera tener cientos de bitcoin en exchanges, suficientes para mantener el teatro de la compra diaria de un bitcoin de aquรญ hasta que logren pagar el prรฉstamo del FMI y puedan, en efecto, reanudar sus compras reales.
Pero la Oficina Nacional de Bitcoin es la รบnica que dice que El Salvador sigue comprando Bitcoin. El Rey Filรณsofo, despuรฉs de ser tan vocal sobre el tema y asegurar que El Salvador no se arrodillarรญa ante nadie, no publica nada sobre Bitcoin desde el 30 de enero de este aรฑo; solo hace retweets, sin afirmar ni refutar absolutamente nada, dejando la doble verdad en un estado de suspenso.
Lรณgicamente, la doble verdad de los bitcoin de El Salvador no se sostiene. Ese estado cuรกntico, schrรถdingereano, en el que El Salvador compra y no compra bitcoin al mismo tiempo, no es mรกs que propaganda para seguir encantando bitcoiners.
Luego de ser pioneros en la adopciรณn de bitcoin a nivel de Estado Naciรณn, abriendo la puerta para que polรญticos de todo el mundo tomaran confianza para implementar polรญticas similares, probablemente influyendo tambiรฉn en la decisiรณn de Donald Trump de promover esta industria en Estados Unidos, parece que el FMI logrรณ acabar con esta primera etapa de Bitcoin en el Estado salvadoreรฑo.
Tras eliminar el curso legal, descontinuar la Chivo Wallet, liquidar FideBitcoin, y demรกs, la criatura de Bretton Woods parece estar logrando defender su rol como garante de la supremacรญa del dรณlar a nivel estatal. Sin embargo, esto pudiera ser una tรกctica dentro de la visiรณn estratรฉgica de Bitcoin en El Salvador.
Desde la perspectiva de interรฉs nacional, puede que El Salvador necesitara momentรกneamente del FMI y estรฉ eligiendo ceder a sus condiciones por motivos de razรณn de Estado. No obstante, el hecho de que estรฉ manteniendo esta suerte de doble discurso con respecto a las compras de Bitcoin demuestra que no estรก dispuesto a soltar esta narrativa y que le conviene mantener el favor de los bitcoiners, que sabe el fuerte potencial de esta industria.
Hasta entonces Bitcoin en El Salvador continรบa por el camino en el cual naciรณ, desde el espรญritu emprendedor de sus comunidades, ciudadelas, economรญas circulares y educadores, ahora probablemente con mรกs impulso porque se ha deslastrado de la carga ideolรณgica con que los detractores del gobierno asociaban a Bitcoin.
Bitcoin no ha necesitado de ningรบn gobierno para avanzar. Ante la red, todos los nodos son iguales. Y si el gobierno de El Salvador no estรก comprando BTC, pues mayor oportunidad para los salvadoreรฑos de acumular.