¿Qué es y cómo funciona una dApp?

DApp es un término que se utiliza para definir aquellas aplicaciones financieras, sociales o tecnológicas que han sido codificadas en una red de criptomonedas. Se diferencia de las aplicaciones tradicionales, como Whatsapp, Twitter o CandyCrush, porque trabajan con contratos inteligentes y sus operaciones se procesan de forma distribuida gracias a mineros o validadores.

Las dApps operan a través de unas reglas predefinidas y codificadas, mejor conocidos como contratos inteligentes, los cuales se ejecutan de manera automática y no requieren de la intervención humana. Asimismo, todas sus operaciones quedan registradas en el libro de contabilidad de la red (blockchain), el cual puede ser revisado o monitoreado por cualquier participante.

Vale destacar que, en su mayoría, las dApps son de código abierto y utilizan criptomonedas o tokens para crear su propia economía y ofrecer servicios financieros.

Podemos encontrar ejemplos de dApps en todas partes. De hecho, dentro de esta categorización están las stablecoins, los juegos play-to-earn, los exchanges descentralizados, las plataformas de préstamo descentralizado, algunos NFT o mercados de NFT y también los tokens wrapped. Te contamos más detalles sobre este sistema en nuestra criptopedia.

¿Cómo funcionan las dApps?

Todos hemos escuchado hablar sobre las Apps. De hecho, gran parte del mundo actual se desarrolla gracias a ellas, sobre todo si hablamos en términos económicos y financieros. Las apps son, como su nombre lo indica, aplicaciones de software instaladas en dispositivos que les permiten a los usuarios realizar tareas específicas, ya sean de carácter profesional o solo de entretenimiento. Aquí podemos mencionar desde las apps más populares, como Instagram, Facebook y YouTube, hasta las aplicaciones de bancos y dinero virtual, como Paypal.

Lo que tienen en común todas estas aplicaciones es que operan de forma centralizada, es decir, que dependen de una empresa para tomar decisiones y cambiar políticas, normalmente sin tener en cuenta la opinión de sus usuarios. De hecho, plataformas como Youtube han recibido muchas quejas por el cierre arbitrario de cuentas, mientras que Facebook establece políticas de censura cada vez más estrictas. En estos casos, nosotros como usuarios no tenemos control ni autonomía en este tipo de aplicaciones.

Es en este escenario donde aparecen las dApps como una alternativa descentralizada. Con las dApps es posible que los usuarios tengan un mayor dominio de los datos y menor capacidad de censura sin comprometer el funcionamiento que ofrece una aplicación tradicional; las dApps nos permiten enviar, crear y recibir información y las podemos usar en distintos dispositivos. Pero ¿cómo funcionan?

Las dApps se construyen sobre una red de criptomonedas determinada, la cual cuenta con su respectivo protocolo: un algoritmo de consenso, lenguaje de programación y hasta política monetaria. Las aplicaciones descentralizadas se componen por uno o varios contratos inteligentes, los cuales trabajan en la red de criptomonedas. Asimismo, funcionan con base en una plataforma front-end, que puede ser una página web o una aplicación móvil.

Podemos decir que cada cliente de una dApp funciona como un nodo que conforma, junto con otros usuarios, una especie de “certificador” o “notario” colectivo, el cual valida y registra todas las transacciones que se realizan en la plataforma. Vale destacar que este registro no requiere de una autorización manual de cada usuario, pues esto se realiza de manera automatizada gracias a los contratos inteligentes.

Con cada operación o transacción que se realiza, los datos se actualizan en cada nodo. Esto quiere decir que existe una copia de seguridad del historial de la aplicación en todos los nodos; por lo tanto, si un usuario desaparece, la información no se verá afectada, pues existen cientos de copias en la red. En líneas generales, podemos decir que el propio sistema es el que se encarga de todo: de validar cada interacción, de llevar a cabo un registro minucioso de las operaciones, entre otros.

Las dApps tienen una economía interna programada. Esta economía define la moneda que se utilizará, su cantidad total y cómo se genera. En algunos casos, la creación de tokens depende de validadores o mineros, mientras que en otros es el propio algoritmo el que los genera automáticamente. Por ejemplo, cuando quieres generar una representación de bitcoin en Ethereum, el contrato inteligente se encarga de forma automática de resguardar los fondos dados y crear otros equivalentes que se puedan mover en Ethereum. A esto se le conoce como wrapped tokens.

¿Cuál es la clasificación de las dApps?

Las aplicaciones descentralizadas se pueden clasificar de muchas formas según sus características, sin embargo, la categorización más común se rige según si las dApps utilizan su propia red de criptomonedas o no. De acuerdo con este criterio, existen 3 tipos de aplicaciones descentralizadas:

1. Aplicaciones descentralizadas del tipo I. Son las que cuentan con su propia red de criptomonedas. Dentro de esta categoría podemos encontrar a Bitcoin, Litecoin, Ethereum, Tron, entre otras.
2. Aplicaciones descentralizadas de tipo II. Estas dApps requieren de una red de criptomonedas de una aplicación descentralizada de tipo I. Este tipo de dApps funcionan como protocolos y cuentan con tokens para su funcionamiento. Un ejemplo sería el protocolo Omni y MarkerDAO.
3. Aplicaciones descentralizadas de tipo III. Las dApps tipo III usan los protocolos de las aplicaciones de tipo II. Asimismo, funcionan como protocolos y también cuentan con tokens para su funcionamiento. Como ejemplo tenemos la red SAFE, que se basa en el protocolo Omni para poner en circulación “safecoins”.

¿Cuál es la diferencia entre una app tradicional y una dApp?

Tanto en las apps tradicionales como en las dApps existe lo que conocemos como Front-end, que se trata de la parte o experiencia que el cliente puede visualizar. Estamos hablando del diseño que permite la interacción entre la app y el usuario. En este aspecto, ambos tipos de aplicación son muy similares, teniendo servicios de atención al cliente, funciones para interactuar con los servicios de la aplicación y un perfil para hacer seguimiento a las actividades.

Las diferencias aparecen cuando hablamos sobre el funcionamiento y, sobre todo, el almacenamiento de la información. Estos aspectos se conocen como Back-end, que es la parte interna que nosotros como usuarios no podemos ver.

La principal diferencia entre una aplicación tradicional y una aplicación descentralizada consiste en la infraestructura que utilizan. Recordemos que las Apps tradicionales requieren de servidores centralizados para ejecutar los códigos y almacenar los datos, mientras que las dApps funcionan gracias a una red de criptomonedas y contratos inteligentes.

¿Cuáles son los beneficios de usar dApps?

Una de las principales ventajas que ofrecen las dApps es la seguridad. Como están construidas a través de la una red de criptomonedas, en teoría, todas las transacciones son transparentes e inmutables. Esto significa que una vez que los datos fueron añadidos a la cadena de bloques, no pueden ser alterados. Asimismo, la transparencia de esta tecnología les permite a sus usuarios verificar no solo las transacciones, sino también el funcionamiento de la aplicación sin tener que recurrir a una entidad central. De este modo, se reducen las manipulaciones y los fraudes.

Por otro lado, las dApps ofrecen fiabilidad a sus usuarios. En las aplicaciones centralizadas o tradicionales, el funcionamiento puede sufrir fallos o detenerse si el servidor principal se cae, mientras que las dApps siguen operativas aunque algunos nodos de la red fallen. Además, las dApps se caracterizan por su resistencia a la censura, pues dificultan la intervención gubernamental o corporativa. Esto es posible porque la red de criptomonedas dificulta cualquier intento de manipulación externa, lo que les permite a los usuarios ejercer mayor control sobre sus datos.

¿Cómo utilizar una dApp?

En primer lugar, debes tener una billetera de criptomonedas que sea compatible con la red en la que se ejecuta la dApp que quieres usar. Entre las billeteras más populares encontramos MetaMask, Coinbase Wallet y Trust Wallet. Las billeteras te permiten interactuar con las dApps y almacenar las criptomonedas.

Puedes encontrar dApps en muchas plataformas. De hecho, muchas dApps cuentan con su propio sitio web, lo que te permite acceder a ellas de forma directa. También existen “exploradores de bloques”, los cuales sirven para buscar y explorar diferentes dApps. Etherscan es actualmente uno de los más populares, junto con DappRadar. Recordemos que el término “dApp” engloba muchos servicios, asi que todo dependerá de lo que esté buscando el usuario; si bien la mayoría están relacionadas con finanzas, también hay muchas relacionadas con videojuegos y stablecoins.

Cuando hayas seleccionado tu dApp, esta te pedirá que la conectes a una billetera. De este modo, le permites acceder a la dirección de tu wallet y sincronizar ambas aplicaciones (la dApp con la billetera). Una vez que concluyas este paso, ya puedes interactuar con la dApp así como utilizas cualquier otra aplicación. Ten en cuenta que algunas interacciones, como por ejemplo realizar transacciones, pueden requerir que confirmes la acción; esto es necesario para mantener la seguridad de tus fondos.

¿Qué tan segura es una dApp?

Como mencionamos en párrafos anteriores, las dApps se caracterizan por ser seguras, sin embargo, es importante aclarar que la seguridad de una red de criptomonedas dependerá del nivel de descentralización de los nodos y la cantidad de mineros y validadores activos en la red; incluso puede depender de su tipo de codificación. Asimismo, como sucede en todas las cosas digitales, siempre es importante tener algunos factores en cuenta para prevenir inconvenientes.

Por ejemplo, puede suceder que una dApp esté mal diseñada. Cuando pasa esto, es más probable que la aplicación pueda ser explotada por hackers, lo que podría traer como consecuencia el robo o extravío de los fondos. Pero podemos evitar este riesgo seleccionando dApps mejor reputadas que hayan sido auditadas por una firma de seguridad independiente.

Por otro lado, existen las dApps maliciosas que también fueron mal diseñadas, pero a propósito; es decir, el código fue comprometido de forma intencional. Esta acción les permitiría a los creadores de la aplicación robar los fondos. Este inconveniente se puede evitar investigando bien a los creadores de la dApp y apostando por opciones que tengan buenas reseñas por parte de los usuarios.

Asimismo, hay que tener en cuenta las dApps de phishing, que buscan robar información personal o financiera haciéndose pasar por una empresa o institución. Para evitar este problema se recomienda verificar muy bien la URL de la página web y no confiar en las pestañas emergentes.

¿Cuáles son las dApps más populares?

Uniswap

Uniswap es una app de código abierto que se caracteriza por sus protocolos basados en la red Ethereum. Sirve para intercambiar de forma automatizada distintos activos digitales mediante su reserva líquida y se ha convertido en el exchange descentralizado con más volumen de comercio dentro de Ethereum.

Wink

Es una de las aplicaciones de intercambio que actualmente tiene la tasa más alta en cuanto a velocidad de transacciones. Su plataforma, que es una variante de TRONBet, les ofrece a sus usuarios varios juegos de casino para los fanáticos de las apuestas. Además, permite incorporar juegos nuevos que hayan sido diseñados por usuarios particulares y diseñadores. Se trata de una dApp que te permite hacer dinero y al mismo tiempo pasar el tiempo.

MakerDao

MakerDao es una DeFi que se encarga de emitir y administrar la stablecoin DAI, así como el token MKR. Se trata de una organización que permite un sistema de préstamos mediante contratos inteligentes. En líneas generales, podemos decir que esta dApp funciona como una especie de banco porque las personas pueden depositar criptomonedas y obtener una ganancia fija a cambio, pero sin tener que lidiar con los procesos y protocolos que supone la banca tradicional.

PancakeSwap

Se trata de una bolsa descentralizada construida sobre la red de criptomonedas de Binance que les permite a sus usuarios intercambiar tokens y criptomonedas. Es el exchange más usado de la BNB Smart Chain y se caracteriza porque ofrece la posibilidad de hacer dos clases de intercambios: instantáneos y órdenes límite. En el primer caso, los tokens se pueden cambiar al precio promedio del mercado; en el segundo, la orden sólo se ejecuta cuando el token que se quiere intercambiar alcanza un precio determinado.