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"Bitcoin será el mismo por toda la eternidad", manifestó Svetski.
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Algunos usuarios expresaron que el límite de la oferta de BTC podría ser alterado.
El analista Aleksandar Svetski señaló recientemente que, a diferencia de Ethereum, Bitcoin mantiene una política monetaria inmutable desde su creación, lo que le confiere una seguridad única dentro del ecosistema. Para Svetski, la consistencia en la oferta de BTC es lo que lo diferencia fundamentalmente de otras criptomonedas, incluyendo ether (ETH), cuya emisión puede cambiar según decisiones de sus desarrolladores.
La respuesta de Svetski se produjo en reacción a un tuit de David Hoffman —cofundador del medio Bankless—, quien indicó que actualmente existen 19.907.600 BTC, con un aumento anual cercano al 1,3%, y que la inflación de ether es diez veces menor que la de bitcoin. Svetski cuestionó la importancia de comparar las cifras de emisión, afirmando que «lo que importa es la garantía», no la cantidad de monedas en circulación.
El argumento de Hoffman es que, aunque solo existirán 21 millones de unidades de bitcoin, ese tope aún no se ha alcanzado ya que las monedas se emiten gradualmente a través de la minería. Al destacar que la inflación de ether es mucho menor, el especialista sugiere que la narrativa de BTC como un activo de suministro fijo y «deflacionario» no refleja del todo la realidad actual. Se estima que bitcoin alcanzará su límite máximo alrededor del año 2140.
No obstante, Svetski explicó que Ethereum puede modificar su política de suministro en el futuro, lo que lo asemeja a un sistema centralizado de emisión de dinero. En contraste, argumentó que Bitcoin fue diseñado para eliminar al emisor de moneda, trasladando su control a reglas fijas basadas en principios físicos y termodinámicos.
Bitcoin «coloca el dinero en el ámbito de la física para que todos podamos dedicarnos a hacer cosas más significativas con nuestras vidas», manifestó.
Cabe destacar que Ethereum ya ha realizado ajustes significativos en su política monetaria. Como reportó CriptoNoticias, con la actualización EIP-1559 de 2021, se implementó un mecanismo que quema parte de las tarifas de transacción, reduciendo la oferta de ETH según la actividad de la red.
Este tipo de modificaciones, decididas y aplicadas por la comunidad de desarrolladores y validadas por los nodos, demuestran que la política de suministro de Ethereum no está grabada en piedra, sino que puede evolucionar según las necesidades o consensos de su ecosistema.
Svetski también destacó que muchas criptomonedas actuales se parecen más al dinero fíat de lo que aparentan, ya que dependen de sus emisores para controlar la creación de unidades. Bitcoin, en cambio, rompe con ese modelo: su oferta es predecible y segura, lo que, según el analista, constituye su principal ventaja frente a cualquier otra moneda digital.
Bitcoin y la confianza: más allá de la reducción de la oferta
Las reacciones de la comunidad ante los comentarios de Svetski reflejaron un debate sobre la seguridad y la previsibilidad de Bitcoin frente a otros proyectos.
Algunos usuarios señalaron posibles vulnerabilidades en el límite de 21 millones de BTC y alegaron que los desarrolladores podrían intentar modificarlo. Svetski respondió con calma: «No estoy tan preocupado como tú. Esas personas pronto encontrarán otro aspecto más brillante en el que enfocarse», minimizando la alarma sobre esos cambios potenciales y sugiriendo que no vale la pena preocuparse por cosas que aún no han ocurrido.
Otros comentarios subrayaron que «la oferta de monedas no es lo importante, sino la credibilidad». En ese sentido, un usuario describió a ETH como «una moneda fíat ineficiente disfrazada de innovación, que crea problemas solo para vender soluciones». Según este comentarista, mientras que ether y otros proyectos pueden ajustar sus políticas mediante consenso entre personas —lo que los hace vulnerables a la corrupción—, bitcoin se rige por reglas codificadas, respaldadas por energía y matemáticas.
También hubo quienes enfatizaron que se le da demasiado crédito a la reducción de la oferta que ocurre cada cuatro años en Bitcoin, y que la verdadera confianza de la gente reside en la certeza de su suministro.