Hay una línea cada vez más clara entre los países de Europa que adoptan bitcoin y los países que no lo hacen. Si bien la mayoría de ellos han reconocido que al menos bitcoin es ampliamente negociado y se utiliza la moneda virtual (incluso si no saben qué hacer con él), otros como Dinamarca han acogido plenamente la integración de bitcoin en sus economías y han hecho esfuerzos para asegurar su comercio seguro.
Pero los hechos que apuntan que bitcoin continúe siendo, sin duda, el método de elección de pago de bienes ilegales y que sea fácilmente hackeable, siguen impidiendo su total aceptación por los gobiernos y los bancos en una escala global. En Polonia, los usuarios Bitcoin recientemente encontraron sus cuentas cerradas con procesadores regionales de pago por, lo que parece ser, preocupaciones de seguridad y el riesgo de fraude.
Los procesadores de pago polacos CashBill y BlueMedia, además de un banco, han cerrado las cuentas de las casas de cambio bitcoin locales BitBay, Cryptoins.com, bitmarket24.pl y Bitmarket.pl. Los bancos en Polonia dijeron a éstas empresas de procesamiento de pagos que sus servicios con los bancos estarían terminados si continuaban realizando transacciones bitcoin locales, por lo que les cortaron el servicio. Los bancos acusan el riesgo de fraude y la falta de regulación de seguridad alrededor de las monedas virtuales.
Esta acción por parte de los bancos nacionales polacos es indicativa del escepticismo general que rodea la adopción bitcoin en muchos países, muchas veces fundamentada en la falta de regulación. Es comprensible, pues la moneda es volátil, las casas de cambio mundiales se han derrumbado en el último año, se asocia la moneda a los mercados masivos subterráneos como Silk Road y la Autoridad Bancaria Europea ha sido difusora de los enormes riesgos involucrados en la adopción bitcoin. Dejando en claro que las criptomonedas son atacadas con frecuencia y facilidad.
Otros países europeos buscan la adopción bitcoin
Así, mientras Polonia presenta retos para la adopción bitcoin, sus preocupaciones acerca de la moneda no son infundadas. Sin embargo, otros países europeos se están moviendo a toda máquina trayendo bitcoin en el uso corriente.
SpectroCoin, un procesador de pagos y casa de cambio bitcoin europea, lanzó una tarjeta de débito a principios de junio que se puede cargar con moneda digital y puede ser aceptada por los comerciantes de todo el mundo. BitStamp, otra plataforma bitcoin europea, emitió un producto similar en la forma de una tarjeta de débito prepagada, los bitcoins en ella se pueden convertir en euros, libras esterlinas, o en dólares estadounidenses. Coinzone está lanzando una billetera Bitcoin móvil para los usuarios en Europa. Y la Administración Federal Tributaria Suiza ha determinado recientemente que, ya que bitcoin es una moneda, las transacciones con la criptomoneda no esán sujetas al IVA en el país.
La legitimidad de Bitcoin está creciendo en esas formas a pesar de sus obstáculos en países como Polonia. El hecho es que su intercambio, el comercio y el uso; prosperarán independientemente de que las instituciones financieras nacionales apoyen o no la adopción bitcoin.