Rusia pretende castigar a todos aquellos que usen criptomonedas, dada la posibilidad de uso en secuestros y lavado de dinero por la dificultad que posee para el rastreo de transacciones.
Según lo que ha dicho el Ministerio de Finanzas de Moscú, se tiene previsto castigar a quienes utilicen monedas virtuales con multas de hasta 2,5 millones de Rublos, lo que equivale a 38.000 dólares, y también se ejecutarán sentencias de prisión de 4 a 7 años. La propuesta prohibirá la emisión de cualquier criptomoneda y su uso a cambio de cualquier bien o servicio en Rusia.
El servicio de prensa del Banco Central de Rusia dijo a través de un correo electrónico lo siguiente:
«Bitcoin se puede utilizar para financiar la economía sumergida y los crímenes, y este riesgo no lo podemos permitir en el sistema financiero de Rusia, el cual estamos tratando de hacer transparente y saludable”.
Los esfuerzos de Rusia por crear confianza hacia el Rublo existen desde la caída de la Unión Soviética, ya que se quería detener la exigencia de los rusos al pedir sus pagos en dólares estadounidenses u otras monedas extrajeras. A mediados del 2006 el gobierno eliminó ciertos controles que limitaban las salidas de efectivo, y en el 2014, el banco central comenzó a permitir que el valor de la moneda fuera ajustada casi en su totalidad por el mercado.
El año pasado, el Banco de Rusia tomó acciones legales contra 34 prestamistas, las cuales terminaron en la revocación de las licencias de éstos, y las razones fueron que supuestamente se violaron leyes que prohíben el lavado de dinero y existía financiamiento del terrorismo.
No es de extrañar que si el gobierno de Rusia sospecha que actividades ilícitas se hacen con monedas virtuales, estos tomarán medidas en contra de estas. No obstante, Rusia tiene una opinión totalmente distinta de la tecnología Blockchain. El viceministro de finanzas Alexei Moiseev dijo que la Blockchain es una tecnología prometedora, la cual se proyecta con un gran futuro.
Moiseev también dio su opinión sobre el Bitcoin en una entrevista: «Podemos ver con qué rapidez, más o menos en el transcurso del año, esto se convirtió en una realidad de nuestra vida económica»
“El Bitcoin en su esencia es un sustituto de dinero, por lo que en última instancia conduce a que el banco central pierda el control sobre la oferta de dinero” agregó el viceministro Moiseev.
Aunque muchos podrán estar en desacuerdo, Rusia no es el único país en el mundo que ha tomado esta posición con respecto a las criptomonedas. Países como Bolivia, Islandia y Vietnam también han adoptado medidas para penalizar el uso de estas.
A pesar de que las monedas digitales no son controladas por ningún gobierno o banco central, éstas permiten a sus usuarios proteger sus ahorros contra la devaluación de monedas nacionales, lo que ha proporcionado refugio a ciudadanos en países con una devaluación como la que vive Venezuela, país en el cual existe un control cambiario que hace muy difícil la tarea de conseguir dólares a la tasa oficial; lo que ha originado un mercado negro, en donde la caída de un 98% del bolívar frente al dólar hace que, 1 dólar tenga un valor de aproximadamente 1.200 bolívares.
El hecho de la seguridad de los ahorros, sumado a la adopción por entidades financieras como Wall Street e incluso el Banco de Inglaterra, nos hace dar cuenta que la prohibición de las criptomonedas por parte de Rusia y cualquier otro país no tendrá ningún efecto dramático. Las entidades financieras alrededor del mundo se están dando cuenta de que Bitcoin es el futuro.
Jon Matonis, quien es director fundador de la Fundación Bitcoin dijo:
Una prohibición sería imposible de aplicar, ya que es una tecnología peer-to-peer, es una tecnología de uso compartido de archivos, y lo que la gente tiene que hacer para manejar la prohibición es tener ordenadores con conexión a Internet. Este punto de vista está fuera de sintonía con el resto del mundo. Es como tener que preocuparse acerca de la gravedad, ¿qué se puede hacer?