-
Peterson explica cómo el uso de bitcoin mejoró la vida de muchos comerciantes de El Salvador.
-
A pesar de la baja adopción asegura que es fácil vivir con el estándar bitcoin en El Salvador.
«Los que más se oponen al uso de bitcoin (BTC) son las élites económicas que rechazan a Bukele. Son una especie de vieja guardia que ven en la moneda digital un desafío para su monopolio bancario». Esto es lo que comenta Mike Peterson, uno de los principales líderes de Bitcoin Beach, la ciudadela pionera de El Salvador.
Durante una conversación en YouTube con el presentador de podcasts de Bitcoin, Stephan Livera, Peterson habló sobre los desafíos que tiene actualmente el proceso de adopción de la moneda digital en el país centroamericano. Sobre todo ahora, que inicia un nuevo periodo presidencial para Nayib Bukele.
El bitcoiner reconoce que hay varios grupos anti-bitcoin que actúan principalmente movidos solo por oponerse a Bukele, aunque también ven en BTC un peligro para sus intereses. Destacan, entre ellos, los bancos que tienen el monopolio de envío de remesas desde el extranjero y a los cuales no les conviene que se masifique el uso de las criptomonedas.
«Además de los ricos y la élite económica, hay también opositores de clase media e incluso algunos de la clase trabajadora». Peterson admite, en ese sentido, que los niveles de adopción tampoco son altos en el país por otras diversas razones.
Cita entre las causas, las dificultades técnicas para hacer pagos con las criptomonedas.
«Suele suceder que en una tienda es solo el gerente o el dueño el que sabe manejar el terminal para pagos con BTC, mientras el empleado desconoce el proceso», agrega Peterson. Con ello revela una circunstancia, vinculada a la falta de entrenamiento, que obstaculiza la ejecución de transacciones a nivel práctico.
Lo anterior lleva a que muchos comerciantes opten por no aceptar pagos con bitcoin, a pesar de que existe la obligación legal de aceptarlo. La desmotivación fue mayor en 2022, cuando el mercado de bitcoin experimentó una fuerte caída. Pero desde mediados de 2023 hay mayor interés debido al alza de precio.
De ahí que haya crecido el número de comercios de El Salvador que aceptan pagos con bitcoin. Las estadísticas lo confirman. Recientes encuestas muestran que el uso de BTC subió a 12% el año pasado, con una mayor cantidad de personas haciendo pagos de servicios públicos, compras en supermercados y en tiendas de electrodomésticos.
Peterson relata que, a pesar de que aún no es masivo, ahora hay más tiendas grandes y medianas aceptando bitcoin en ciudades de El Salvador. Muchas de ellas se han visto beneficiadas con estos pagos ya que no aceptan tarjetas de crédito.
Aunque también hay otros que no quieren aceptar BTC. De hecho, «solo dos de los concesionarios de automóviles lo reciben», acotó Peterson. Y añade que hay comercios pequeños que tienen dificultades para recibir bitcoins porque sus clientes no lo usan, lo cual relaciona con un problema de desbancarización.
Sobre este tema ha hablado en varias ocasiones Román Martínez, otro de los líderes de Bitcoin Beach. Para él, la paciencia es clave dado que los habitantes de El Salvador han tenido un acceso limitado a los servicios bancarios tradicionales. Lo que explica la preferencia de los salvadoreños por el dinero en efectivo.
Recuerda así que el 70% de la población no está bancarizada; «muchos no han podido participar en ningún tipo de inversión en el mercado financiero tradicional, por lo que no es realista pensar que la gente va a aprender a manejar la tecnología de los pagos de la noche a la mañana. Estamos avanzando», añadió Martínez, «pero es un proceso».
Peterson concluye que, a pesar de que la adopción avanza lentamente y que aun representa un desafío, sí es posible vivir bajo el estándar Bitcoin en El Salvador.