Argentina busca un nuevo acuerdo con el FMI, ¿sigue los pasos de El Salvador?

El presidente de Argentina, Javier Milei, informó que solicitará la autorización del Congreso para implementar un nuevo plan de financiamiento apoyado por el Fondo Monetario Internacional (FMI). 

El anunció se hizo durante el discurso que pronunció el mandatario este 1 de marzo, en el marco de la apertura de sesiones ordinarias del Congreso. 

  «Dada la importancia estratégica que tiene este acuerdo para Argentina, quiero anunciarles que en los próximos días le pediré al Congreso que apoye al Gobierno en este nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional», dijo Milei. 

Ratificó así la continuidad de las negociaciones con el organismo para resolver la deuda pendiente y aseguró que el objetivo, de este nuevo programa, es el levantamiento de las restricciones cambiarias que aún persisten en el país en 2025. 

Con el nuevo acuerdo Milei aspira avanzar hacia un esquema cambiario «más libre y eficiente», además de atraer inversiones que se traduzcan en menos inflación. 

«Estamos avanzando en un acuerdo con el FMI para sanear el balance del Banco Central y salir del cepo cambiario definitivamente durante este año», acotó. 

En ese sentido, aclaró que el nuevo programa no aumentará la deuda del país. Por el contrario, «servirá para que el Tesoro cancele su deuda con el banco central».  

Explicó que el acuerdo será posible debido a lo que califica como logros económicos de su gobierno, que incluyó la implementación del plan de emisión cero mediante el cual aplicó una política de reducción de gastos. 

«Gracias a la solvencia de nuestro programa económico, estamos en condiciones de emprender este nuevo acuerdo sin aumentar nuestra deuda bruta», señaló  el presidente argentino, que en febrero pasado sostuvo un encuentro con la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, en Washington.

Tras ese encuentro Georgieva elogió el programa económico del Gobierno, reconociendo el progreso de Argentina en la reducción de la inflación y la estabilización de la economía. 

Hasta el momento, Milei no ha ofrecido detalles sobre el programa y tampoco se sabe si el FMI está dispuesto a prestar más dinero a Argentina, que es su mayor deudor y tiene un historial de incumplimientos. 

¿Restricciones a bitcoin como en El Salvador?

Los compromisos actuales de Argentina con el FMI ascienden a unos 44.500 millones de dólares y se remontan al programa financiero que tomó a mediados de 2018.  

Posteriormente, en marzo de 2022, el país suramericano y el organismo multilateral cerraron un Acuerdo de Facilidades Extendidas (EFF) en el que se establecieron un conjunto de metas económicas. 

Tal como informó CriptoNoticias en ese momento, el país se comprometió a llevar adelante algunos cambios en la política monetaria, económica y financiera, y algunas de las cláusulas del acuerdo tuvieron implicaciones para el ecosistema de bitcoin (BTC). 

Al igual que sucedió recientemente con el gobierno de El Salvador, el FMI incluyó en el acuerdo con Argentina una cláusula sobre bitcoin cuyo primer objetivo plantea «desalentar el uso de criptomonedas con miras a prevenir el lavado de dinero, la informalidad y la desintermediación».  

Se trata de una frase que encendió las alarmas entre los bitcoiners argentinos y que los motivó a solicitar información oficial.

El gobierno de Alberto Fernández dijo que la meta no era desalentar el uso de criptomonedas, y no se plantearon acciones en específico para cumplir con la cláusula. Sin embargo, sigue vigente hasta la fecha, aun bajo el mandato de Javier Milei.

Algo distinto ocurrió en El Salvador, donde el gobierno de Nayib Bukele aceptó reformar la Ley que le daba a BTC rango como moneda de curso legal. Se sabe además que el organismo exigió al gobierno no hacer promoción a la moneda digital y de alguna forma influye en las compras de BTC que se realizan. 

De esta forma, a pesar de que las peticiones del FMI lucen semejantes en Argentina y El Salvador, pidiendo a ambos gobiernos el dejar de lado a bitcoin, todo apunta a que las exigencias han sido más fuertes para el país centroamericano.

En ese sentido, parece que se ha tomado en cuenta que las realidades económicas y el proceso de adopción de criptomonedas difieren en ambos países. Argentina es líder en adopción de bitcoin en Latinoamérica, pero aun no tiene una regulación clara para el sector; mientras los salvadoreños tienen poco interés por BTC, aun cuando sus leyes favorecen su uso.

Adicionalmente, la situación económica de Argentina es mucho más compleja que la de El Salvador. No obstante, ambos gobiernos necesitan el apoyo financiero del FMI para resolver sus problemas financieros.