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Tamas Blummer midió el coeficiente de Gini de Bitcoin con el último millón de outputs de la red.
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El desarrollador se enfocó en las transacciones con una salida y con dos salidas.
El desarrollador de Bitcoin, Tamas Blummer, presentó un nuevo enfoque para medir el coeficiente de Gini de Bitcoin. Según sus estimaciones, el valor actualmente oscila entre 0,94 y 0,96. Esta cifra indica que el índice de desigualdad de la distribución de Bitcoin es elevado.
Blummer adaptó el método de cálculo del coeficiente de Gini con el fin de cuantificar los niveles de la desigualdad en la distribución de bitcoins. Presentó los resultados en un escrito publicado este cinco de junio, y tomó como base de cálculo el último millón de outputs ejecutadas en la red de Bitcoin. Con estos datos, elaboró un gráfico según el cual, entre el año 2012 y principios de 2019, el índice de Gini de Bitcoin ha oscilado entre 0,88 y 0,96.
Tomando en cuenta que los valores de este coeficiente se mueven entre 0 y 1, siendo 0 el valor que indica una igualdad perfecta y 1 el valor que indica la mayor desigualdad posible, se trata de una cifra muy alta, que muestra que los bitcoins se distribuyen de manera poco equitativa.
Blummer explica que, antes de aplicar su enfoque, evaluó otras opciones de cálculo, como la distribución de valores del conjunto de las salidas no gastadas (UTXO), pero reconoció la inutilidad de este método, ya que un solo titular puede poseer más de una salida no gastada. De igual manera, consideró agrupar las salidas por direcciones, lo cual sería erróneo dado que la mayoría de las carteras no reutiliza las direcciones actualmente. Por ello, finalmente decidió trabajar con las transacciones ejecutadas con una sola salida (agregación) y con dos salidas.
Sobre las primeras, señala que muy probablemente «están bajo el control de un solo propietario». Mientras que las transacciones de dos salidas suelen tratarse de un pago, realizado por alguien que tiene el control del valor de entrada total.
Asumo que uno hace transacciones de los tipos anteriores en proporción a la riqueza de uno. Las personas ricas también hacen pequeños pagos con pequeños insumos, pero los pobres no pueden obtener grandes insumos.
Tamas Blummer
Sin embargo, un seguidor de la cuenta en Twitter de Blummer, cree que el método usado subestima la cantidad de saldos pequeños que existen, ya que estos tienden a mantenerse en casas de cambio o carteras de custodia y no generarían transacciones de dos salidas. Además, incluso cuando los usuarios retiran los fondos de estas plataformas, no se capturan los saldos, puesto que se incluyen en lotes que contienen más de cien outputs. Así, el enfoque de Blummer ignoraría las dos transacciones más comunes que realizan los usuarios: dentro de una plataforma de intercambio y cuando se retiran los fondos de ella.
Debate sobre la descentralización de Bitcoin
Al presentar sus datos, Blummer expresa que su intención fue solo entregar las mediciones, acotando que no está interesado en “discutir las implicaciones o los niveles deseados de desigualdad”.
Vale destacar que los cálculos del coeficiente de Gini de Bitcoin que se vienen realizando desde hace unos años, son usados para evaluar el nivel de descentralización. Como los resultados mayormente tienden a indicar un coeficiente superior a 0,8, se dice de que existe un alto nivel de centralización.
Sobre este tema se han pronunciado algunos detractores de las criptomonedas. El año pasado, Nouriel Roubini, economista y profesor en la Escuela de Negocios Stern de la Universidad de Nueva York, publicó un artículo denominado “La gran mentira del Blockchain”. Se refirió al grado de centralización de la minería, el intercambio, el desarrollo y la concentración de riqueza en la industria, a pesar del espíritu con el que se creó la criptomoneda. También criticó que el coeficiente de Gini de Bitcoin sea mayor que el de Corea del Norte, calculado en 0,8.
No obstante, dentro del ecosistema se han realizado algunos análisis relacionados con este tema, que cuestionan la validez de este coeficiente y proponen el uso de otros sistemas para medir el avance de la descentralización.