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Indicadores técnicos señalan una nueva tendencia alcista.
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Factores macroeconómicos y adopción institucional impulsan al precio de bitcoin.
Bitcoin (BTC) parece estar entrando en una nueva etapa de su ciclo, con señales técnicas y factores macroeconómicos que apuntan a una posible fase parabólica. Esta tendencia alcista podría extenderse hasta octubre de 2025, impulsada por indicadores técnicos, acuerdos comerciales internacionales y la creciente adopción institucional.
Bitcoin ha demostrado un comportamiento cíclico ligado a los halvings, eventos que ocurren aproximadamente cada cuatro años y reducen a la mitad la recompensa que reciben los mineros por validar transacciones. Este mecanismo, diseñado para controlar la emisión de nuevos bitcoin, suele desencadenar fases de aceleración en el precio conocidas como fases parabólicas.
Durante estas etapas, el precio experimenta repuntes significativos en un corto período, formando lo que los analistas llaman “mástiles” o «astas» en patrones técnicos como banderas alcistas.
El inversionista y analista David Zanoni señala que todos los ciclos de bitcoin han culminado en una fase parabólica. En los dos últimos ciclos, el período entre el mínimo y el máximo del precio duró exactamente 1.064 días, mientras que el primer ciclo se extendió por 1.148 días.
En el ciclo actual, iniciado tras el halving de abril de 2024, el precio aún no ha alcanzado los 1.064 días, lo que sugiere que podría haber margen para un repunte hasta octubre de 2025. “La reciente acción del precio refuerza esta posibilidad”, afirma Zanoni.
Por su parte, la fase parabólica se caracteriza por una aceleración pronunciada del precio. “Es aquí donde se forman los mástiles de las formaciones de banderas alcistas”, explica Zanoni.
Si el ciclo actual sigue el patrón de los anteriores, esta fase podría durar unos seis meses, comenzando en abril de 2025 y extendiéndose hasta septiembre u octubre. Este período coincide con los 1.064 días promedio de los ciclos previos, lo que respalda la teoría de un repunte sostenido.
Indicadores muestran una tendencia alcista en formación
Los gráficos técnicos ofrecen pistas claras sobre el rumbo de bitcoin. En el siguiente gráfico semanal, el precio ha mostrado una tendencia alcista en abril y mayo de 2025.
El Índice de Fuerza Relativa (RSI), un indicador que mide la velocidad y el cambio de los movimientos de precio, superó el nivel de 50, lo que señala el inicio de una nueva tendencia alcista. Este movimiento se ve respaldado por el Convergencia-Divergencia de Medias Móviles (MACD), otro indicador clave.
La línea azul del MACD está a punto de cruzar la línea de señal roja, mientras que las barras del histograma han pasado de rojo a rosa, con la posibilidad de volverse verdes. “Si la línea azul cruza la línea roja y las barras se vuelven verdes, esto sería una sólida confirmación de una tendencia alcista”, indica Zanoni.
Además, bitcoin parece estar superando una formación de bandera alcista, un patrón técnico que suele preceder movimientos alcistas significativos. Esta formación se consolidó entre diciembre de 2024 y marzo de 2025, tras alcanzar un máximo histórico de 109.000 dólares en enero.
“Es posible que el precio pruebe ese nivel y retroceda antes de superarlo”, advierte Zanoni, quien destaca que romper este umbral sería un paso crítico para confirmar la fase parabólica.
En el gráfico mensual, el RSI se encuentra justo por debajo del nivel de sobrecompra de 70. Históricamente, el RSI ha alcanzado niveles extremos por encima de 90 antes de que el precio toque su máximo. En el ciclo anterior, se formó un doble techo con una divergencia bajista, donde el precio alcanzó un máximo más alto, pero el RSI marcó un máximo más bajo.
“Bitcoin podría tener amplio margen para subir antes de alcanzar su máximo en este ciclo”, sostiene Zanoni, aunque aclara que no hay garantías de que el comportamiento pasado se repita.
Factores macroeconómicos: acuerdos comerciales y política monetaria
Más allá de los indicadores técnicos, los factores macroeconómicos están desempeñando un papel crucial en el repunte de bitcoin.
Los acuerdos comerciales recientes han disipado parte de la incertidumbre que ha afectado a los mercados globales. Por ejemplo, el 8 de mayo de 2025, Estados Unidos y el Reino Unido anunciaron un acuerdo que fortalece las relaciones comerciales bilaterales.
Sin embargo, el foco principal está en las negociaciones entre Estados Unidos y China, que han marcado un hito significativo.
La guerra comercial entre ambas potencias escaló con aranceles que alcanzaron el 145% sobre productos chinos en Estados Unidos y el 125% sobre bienes estadounidenses en China. Además, China impuso restricciones a la exportación de tierras raras, esenciales para la industria tecnológica y militar.
Sin embargo, el 12 de mayo de 2025, ambas naciones acordaron un alto al «fuego» temporal de 90 días, reduciendo los aranceles a 30% y 10%, respectivamente, y estableciendo un mecanismo para continuar las negociaciones. Este acuerdo, reportado por CriptoNoticias, ha sido recibido como un catalizador positivo para los mercados, incluido el de bitcoin.
Asimismo, la posibilidad de que la Reserva Federal recorte las tasas de interés en los próximos meses podría impulsar aún más el precio. Tasas más bajas aumentarían la liquidez en los mercados, beneficiando tanto a bitcoin como a las acciones. Sin embargo, los datos de inflación serán determinantes. “El efecto de los aranceles podría mantener la inflación alta, reduciendo la probabilidad de recortes este año”, advierte Zanoni.
Adopción institucional y dominio de bitcoin
La adopción institucional sigue siendo un motor clave para el precio de bitcoin. Empresas y fondos de inversión han incrementado su exposición a la moneda, consolidándola como un activo de reserva.
Este fenómeno ha contribuido al aumento del dominio de bitcoin en el mercado de criptoactivos, que pasó del 55% al 62% entre diciembre de 2024 y mayo de 2025, explicó el analista financiero Mike Fay.
Fay señala que, a pesar de las expectativas de una “temporada de altcoins” (donde otras criptomonedas superan a bitcoin), el dominio de BTC se ha mantenido sólido. El Índice de Temporada de Altcoins de CoinMarketCap cayó a 12 en abril, pero repuntó a 34 en lo que va de mayo, su nivel más alto en tres meses.
“El rendimiento superior de las altcoins suele ser un indicador de agotamiento del mercado alcista”, explica Fay, sugiriendo que el mercado aún no muestra señales de sobrecalentamiento.
¿Hasta dónde llegará bitcoin?
Zanoni proyecta un precio objetivo de 150.000 dólares para octubre de 2025, basado en un múltiplo de 10 veces el mínimo del ciclo (15.000 dólares) y el nivel de Fibonacci de 2,618. Sin embargo, advierte que el precio podría no superar el máximo histórico de 109.000 dólares.
“Si bitcoin mantiene un repunte por encima de este nivel, es más probable que se produzca una fase parabólica”, afirma.
Por su parte, Fay utiliza el Indicador de Tope del Ciclo Pi, que combina la media móvil de 111 días y un múltiplo de 2x sobre la media móvil de 350 días. Actualmente, este indicador sitúa el tope del ciclo en 157.000 dólares, lo que implica un potencial de subida del 50% desde los niveles actuales.
Otro indicador, el MVRV (ratio entre el valor de mercado y el valor realizado), muestra que bitcoin no está sobrevalorado en comparación con ciclos anteriores. Con un MVRV actual de 212%, está lejos de los picos de 435% en 2017 y 373% en 2021.
Fay también destaca que los rendimientos de BTC han disminuido con cada halving. El primer ciclo generó un retorno del 7.000%, el segundo del 3.000% y el tercero del 1.000%. Para el ciclo actual, Fay considera que un rendimiento del 100% (alrededor de 130.000 dólares) es más realista que el 200% (190.000 dólares). “Sería prudente esperar un rendimiento muy inferior al ciclo anterior”, sostiene.
Narrativa versus fundamentos
Un punto de debate es si el alza de BTC responde a fundamentos sólidos o a una narrativa especulativa. Fay argumenta que el precio está más ligado a flujos de capital hacia una tesis anti-fíat que a la utilidad real del sistema descentralizado.
“Bitcoin, el activo digital, puede apreciarse, pero hasta ahora, esa apreciación se debe más a la narrativa que a una base de usuarios en crecimiento”, comenta.
Aun así, Fay no descarta el potencial de bitcoin. “Dado el alza del precio, el interés de los inversionistas y la falta de indicadores de sobrecalentamiento, bitcoin sigue siendo una buena opción de compra”, afirma.
Sin embargo, advierte que los mineros de Bitcoin podrían enfrentar desafíos a largo plazo si los incentivos para validar transacciones disminuyen.
Un camino alcista para bitcoin, pero con riesgos
Bitcoin parece estar configurándose para una fase parabólica que podría llevar su precio a nuevos máximos en los próximos meses. Los indicadores técnicos, los acuerdos comerciales y la adopción institucional respaldan esta perspectiva, aunque los riesgos persisten.
La inflación, las decisiones de la Reserva Federal y la capacidad de superar el máximo histórico de 109.000 dólares serán factores clave a monitorear.
Los inversionistas deben proceder con cautela. Como advierte Zanoni, “no hay garantía de que bitcoin se comporte como en ciclos anteriores”. Sin embargo, con un RSI lejos de niveles de sobrecompra y catalizadores macroeconómicos en juego, el escenario alcista parece sólido.