-
Por ahora, Nano Labs mantiene un modelo de negocio híbrido.
-
Analista califica las ambiciones de Nano Labs como "extremadamente altas y poco realistas".
Nano Labs, una compañía tecnológica nacida como fabricante de chips ASIC para la minería de Bitcoin, está viviendo una metamorfosis impulsada, en gran parte, por BNB, la criptomoneda creada por el exchange Binance. Se trata de un viraje dado en un contexto de baja rentabilidad en su unidad principal de hardware, que llevó a sus directivos a buscar mejores opciones.
En 2024, los ingresos totales de Nano Labs por la venta de chips especializados para minar Bitcoin apenas superaron los 5,6 millones de dólares. Esto, a pesar de innovaciones como los chips Cuckoo 3.0 y el FPU 3.0, que ofrecieron un rendimiento energético 83% superior frente a modelos anteriores. Aunque diseñados para minería en pequeña escala, con bajo consumo y operación silenciosa, los productos no generaron la tracción esperada en el mercado global.
Por otro lado, la empresa, fundada en 2019 en Hangzhou y listada en bolsa desde 2022, contó a finales de 2024 con una capitalización bursátil de 139 millones de dólares. Además, en su balance figuraban 4,5 millones en efectivo y una deuda cercana a los 27 millones, lo que limitaba su margen operativo.
En la siguiente gráfica se puede apreciar el ingreso recibido por Nano Labs únicamente por su negocio de chips de minería de Bitcoin:
Todo lo anterior fue el aliciente necesario para que se despertara el interés estratégico por las criptomonedas. Esta idea cobró mayor peso en los primeros meses de año y no fue sino hasta junio de 2025 cuando Nano Labs emitió notas por 500 millones de dólares para financiar una nueva etapa: la acumulación de reservas de 400 bitcoin (BTC) y 120.000 BNB, alcanzando un total combinado de USD 160 millones.
A la par del aumento de su exposición a criptoactivos, Nano Labs anunció que su unidad de tesorería en bitcoin y BNB sería una división operativa autónoma. En ese marco, también presentó planes para lanzar una plataforma de stablecoins llamada NBNB.io, en colaboración con Orbiter Finance, con respaldo en el dólar hongkonés (HKD) y el yuan chino offshore (RMB). Su lanzamiento está previsto para el cuarto trimestre de 2025.
La ambición no termina allí. Según su plan estratégico, Nano Labs tiene como objetivo controlar entre el 5% y 10% del suministro circulante de BNB. Esta meta implica una inversión entre USD 5.300 y 10.600 millones de dólares, tomando como base una capitalización de mercado de BNB de 106.700 millones.
Una tendencia creciente
Esta estrategia de Nano Labs, de apoyarse en una reserva estratégica de activos digitales, se enmarca dentro de una tendencia reciente: empresas de tecnología o capital de riesgo ya comienzan a posicionarse como actores institucionales dentro del ecosistema BNB. En este grupo también figura WindTree Technologies, firma del sector biotecnológico que anunció su decisión de abrir una tesorería de BNB y financiar la compra con deuda, como lo reportó CriptoNoticias.
Esta dinámica ha llevado al fundador de Binance, Changpeng Zhao, a afirmar que se está gestando una “MicroStrategy de BNB”, en alusión al modelo adoptado por la empresa estadounidense MicroStrategy, que desde 2020 ha consolidado una reserva que, actualmente, supera los 600.000 bitcoin.
Ahora bien, Nano Labs, a diferencia de Strategy, continúa combinando operaciones de hardware con inversiones en criptomonedas. Aunque conserva su portafolio de productos ASIC, su prioridad operativa se ha desplazado hacia las finanzas digitales.
En su más reciente presentación trimestral, la empresa detalló que su estrategia Web3 incluye el desarrollo de infraestructura técnica para stablecoins compatibles con las cadenas BTS y BNB, con integración en entornos de interoperabilidad.
No obstante, el riesgo es latente. Nano Labs ya ha quemado más de 24 millones de dólares en efectivo durante 2024. Y, aunque no planea vender sus criptomonedas para financiar operaciones, depende de la evolución de los precios de BTC y BNB para mantener la viabilidad de su nueva hoja de ruta.
Además, la apuesta por la stablecoin NBNB.io también enfrenta obstáculos. El mercado global ya está dominado por USDT y USDC, dos stablecoins reguladas y con amplia adopción. Posicionarse en ese nicho implica competir en un entorno consolidado, donde la diferenciación será clave. Asimismo, lograr licencias regulatorias en Hong Kong, operar con dos monedas fíat diferentes y mantener paridad efectiva con respaldo en reservas bancarias eleva la complejidad técnica y legal del proyecto.
Como lo ve la analista Myriam Alvarez, las ambiciones de Nano Labs, si bien son altas, también son “posiblemente poco realistas”.
“La intención de controlar una parte significativa del ecosistema BNB y lanzar una stablecoin competidora de USDT y USDC son metas que requieren recursos que la empresa no tiene actualmente. Hasta ahora, ha financiado estas iniciativas con deuda y emisión de acciones, lo que incrementa el riesgo”, dice la especialista.
Y añade que, por estas razones, Nano Labs se perfila más como una jugada “de alto riesgo” que como un fabricante de chips tradicional. “Aunque el potencial de recompensa existe, la incertidumbre es elevada. En consecuencia, se recomienda mantener una posición neutral por el momento”, dijo Alvarez.
Una medida favorable
A pesar de estos retos expuestos por la analista, la compra de BNB ha resultado favorable, al menos hasta ahora. El activo mantiene una tendencia alcista, tanto, que ha marcado máximos históricos en las últimas horas, llegando hasta los 860 dólares y acumulando subidas anuales de 86%.
Ni hablar de bitcoin, que acumula un crecimiento sostenido del 30% en lo que va de año, pasando de 94.000 dólares a USD 118.000, llegando a marcar récords de 123.000 dólares, como ha sido reportado CriptoNoticias.
En general, el desempeño positivo de ambos activos que conforman las reservas de Nano Labs, ha favorecido los rendimientos de la compañía. Y más que eso, han validado parcialmente su estrategia de mantener BNB y bitcoin a largo plazo.
Esto último se ha reflejado en las acciones de la compañía, que aumentaron de forma explosiva en un 726% en cuestión de 20 días desde que se anunció la reserva corporativa de BNB a inicios de junio. Y aunque han corregido hasta los USD 8,10 al cierre de este reporte, las acciones de Nano Labs han incrementado 71,2% al cabo de tres meses, como se aprecia en el siguiente gráfico:
Aun así, la analista Alvarez insiste en su alerta ya que, si bien cree que el potencial de crecimiento existe, el mismo está condicionado a la apreciación sostenida de los activos digitales y al éxito de sus proyectos.
De cualquier forma, BNB transformó a Nano Labs, alejándolo de su perfil original como diseñador de chips de minería y llevándolo hacia la inversión en activos digitales con gran capitalización y potencial de revalorización, pero sin abandonar sus orígenes.
En esencia, es una evolución clara hacia un modelo híbrido, centrado en reservas y desarrollo de infraestructura. Algo que redefine su identidad en el mercado, pues lo que comenzó como una operación modesta de semiconductores, hoy busca posicionarse como una plataforma con aspiraciones globales, y justo en un momento en el que BNB vive uno de sus ciclos más expansivos.