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Estados Unidos imprimiría dólares para financiar la guerra y costear la inflación de la energía.
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Cuando el M2 se disparó durante el COVID, bitcoin llegó hasta USD 69.000.
Adam Livingston —autor del libro The Bitcoin Age and The Great Harvest—, considera que la escalada en la guerra entre Israel e Irán, que ahora cuenta con la participación de los Estados Unidos, es «un catalizador alcista de grado nuclear para bitcoin». Así lo comenta en un post del 22 de junio en la red X, donde disecciona por qué los aviones de guerra sobre el Estrecho de Ormuz «disparan una bala» contra la tesis bajista para el precio del crtiptoactivo.
El analista de bitcoin considera que este evento global es catalizador alcista de bitcoin porque Estados Unidos imprimiría dólares para financiar la guerra, todo mientras el precio del petróleo se dispara debido a la probable clausura del Estrecho de Ormuz, un camino marítimo que es responsable de canalizar el 20% del petróleo global.
El 21 de junio, varios bombarderos B-2 de Estados Unidos atacaron al menos tres bases nucleares iraníes, e Irán respondió con 120 misiles sobre Tel Aviv, la que fue la ciudad capital de Israel. Esto fue ratificado por Donald Trump el 21 de junio en su red Truth Social, quien comentó lo siguiente: «Hemos completado con gran éxito nuestro ataque contra tres instalaciones nucleares en Irán, entre ellas Fordo, Natanz y Isfahán. Todos los aviones se encuentran ahora fuera del espacio aéreo iraní». En este escenario, «guerra no es igual a pánico, es una oportunidad», comentó Livingston.
El análisis de Livingston destaca que la clausura de Ormuz podría generar caos energético, lo que no es negativo para Bitcoin. Su autor menciona una estimación de JP Morgan, que sitúa el precio del Brent (un tipo de petróleo liviano) entre 120 y 130 dólares si el estrecho se ve afectado, causando inflación en los precios de energía. En efecto, el precio del petróleo Brent muestra un aumento superior al 2% en los últimos 5 días, y ya se negocia por encima de los 71 dólares al momento de la redacción.
«La inflación de la energía es la chispa; la ‘gasolina monetaria’ es la explosión» para bitcoin, comenta Livingston. Con esto, el analista quiere decir que cuando existe una marcada inflación en los precios de la energía debido a guerras y «cisnes negros» geopolíticos, de la cual el precio actual del petróleo es un síntoma o marcador fiable, la base monetaria mundial crece para costear los precios. Para demostrarlo, Livingston cita varios ejemplos históricos.
Uno es la guerra del golfo, donde la oferta monetaria M2 (una medida amplia de la oferta monetaria mundial) aumentó un 5% y los precios del petróleo se triplicaron. Este patrón se habría repetido en la guerra de Irak de 2003, durante la cual el balance de la reserva federal de Estados Unidos (FED) habría aumentado en 400 mil millones de dólares.
La ampliación de la base monetaria mundial, especialmente la de Estados Unidos, produce la inflación de las monedas fíat, lo que es positivo, históricamente hablando, para el precio de bitcoin. Este criptoactivo es percibido como refugio contra la pérdida de valor de otras monedas que sucede cuando crecen sus ofertas monetarias.
Como reportó CriptoNoticias, hay ejemplos históricos de que cuando la oferta M2 aumenta y la inflación se «come» el valor del dinero fíat, el precio de bitcoin tiende al alza. En 2020-2021 durante el COVID, cuando los estímulos masivos dispararon el M2 en economías clave, bitcoin respondió pasando de 10.000 dólares a 69.000 dólares en pocos meses.
Adam Livingston cree que la guerra entre Israel y EE. UU, a la que podrían unirse otros actores próximamente contra o a favor de Irán no será la excepción, y replicará estos patrones históricos donde el aumento de la oferta M2 correlaciona positivamente con un aumento en el precio de bitcoin.
El dominio fiscal ha vuelto. Presupuesto de guerra: $210 mil millones suplementarios + recarga de la Reserva Federal. La Reserva Federal es un meme: el Tesoro emitirá, la Reserva Federal comprará y los economistas lo llamarán «facilidades temporales». Traducción: dólares nuevos saliendo de la impresora más rápido que los drones del CGRI.
Adam Livingston, analista del precio de bitcoin.
«La geopolítica acaba de proporcionarle a Bitcoin el motor de dos tiempos perfecto: caos energético al inhalar, devaluación fiduciaria al exhalar. Cada barril extraído del mercado genera nueva escasez digital», apuntala Adam Livingston, quien además considera que un portafolio sin un peso de al menos 3% en BTC antes de que abran los mercados asiáticos representa un peligro para la gestión de riesgo.