Las misiones nobles requieren foco. Intentar malabarear múltiples intereses dispares muchas veces no deja más que el cansancio. En una época en la que abundan las distracciones, hay mentes privilegiadas que tienen su propósito claro. Es el caso de Adam Back, fundador de Blockstream, creador de Hashcash y primera persona en recibir el white paper de Bitcoin de la mano del propio Satoshi.
Back no cree, como Nietszsche, que la vida sin música sería un error. Cuando le preguntamos sobre qué le gustaba escuchar, respondió con un desdeñoso y generalizado de todo. Tampoco se considera un lector, aunque, al ingresar a la lista de correos cypherpunk, sí leyó los clásicos que recomendaban ahí: Shockwave Rider, de John Brunner; Neuromancer, de William Gibson; pero el libro que causó una impresión más significativa en él fue Snow Crash, de Neal Stephenson:
“Si lo lees probablemente encuentres algunos temas de Bitcoin, a pesar de que fue escrito hace cuarenta años. Habla sobre las implicaciones del dinero electrónico y de una sociedad mucho más descentralizada, sin gobierno.”
Adam Back
Estos son los intereses de Adam Back: dinero electrónico, criptografía, descentralización y libre mercado. En otras palabras, libertad individual a través de la tecnología, y precisamente así define la labor cypherpunk: “desarrollar tecnología para ayudar a la gente a ayudarse a sí misma”.
Y esto lo que se dispuso a hacer una vez que notó que el proyecto de Bitcoin “había arrancado”. No se involucró de inmediato. Se mantuvo un tiempo en los márgenes, viendo las noticias, hasta después del primer halving, cuando la mitad del suministro ya había sido emitida. Al enterarse que la capitalización de Bitcoin, luego de ser inexistente, había sobrepasado los mil millones de dólares en 2013, confirmó que el proyecto, no solo había arrancado, sino que “iba bastante rápido”.
Hoy Bitcoin es completamente distinto a lo que era en aquel momento. Grandes corporaciones, incluso gobiernos se están involucrando rápidamente porque han tomado consciencia de la escasez de este activo.
A pesar de ello, Back piensa que el espíritu cypherpunk sigue presente en Bitcoin, porque eso es parte de lo que lo hace valioso: ser un activo inconfiscable con el que se pueden hacer transacciones sin permiso desde y hacia cualquier lugar del mundo, dándole la oportunidad de acceder al mercado a todas aquellas personas que trabajan en economías informales, sin cuentas bancarias.
Con todo, el pionero de la criptografía y el dinero electrónico no descarta que Bitcoin pueda ser capturado. Tal como ocurrió con el Internet, que las personas cedan el control sobre su identidad o servicios a terceros, les resta propiedad y soberanía sobre su contenido digital, y lo mismo puede pasar con Bitcoin.
“El precio de la descentralización es la vigilancia eterna. Por lo cual la gente siempre lo está cuestionando todo. Quieren saber ¿esto es seguro? ¿esto es centralizado? ¿esto es malo?
Adam Back
Desde la perspectiva de Back, una de las ventajas que tiene esta incansable vigilancia en un mercado abierto como Bitcoin es que no hay monopolios, sino opciones, y las personas pueden elegir cambiar de servicios o proveer ellos mismos servicios que se ajusten a sus principios, sin que nadie pueda impedirlo. “Existe un equilibrio natural: si los proveedores de servicios empiezan a ser agresivos e imponen demasiadas opiniones del establecimiento, la gente simplemente se irá. Mientras que hoy con los bancos no hay mucha salida”, afirma.
Para disfrutar de la entrevista completa, puedes acceder al siguiente video: