En varias oportunidades las tecnologías de contabilidad distribuida se han perfilado como el mejor aliado de la educación, ya sea como plataforma para el resguardo del conocimiento escrito, la certificación de títulos educativos o el manejo de datos estudiantiles. En este sentido, la Comisión Europea realizó recientemente una investigación que busca estudiar el potenciar y los riesgos de DLT en el sector educativo internacional.
El reporte fue presentado en conjunto con la unidad de capital humano de la oficina JRC Ciencia para Política de Reporte, con la colaboración de 24 personalidades del ecosistema dedicados a las tecnologías distribuidas, la educación y la política legislativa.
Se destacó que blockchain es una tecnología que supera otras soluciones del mercado dedicadas al sector educativo. Esto se debe a que las herramientas DLT tienen gobernanza propia, confiabilidad, colaboración, transparencia, inmutabilidad y diseminación, características que se adecuan a las necesidades de la comunidad estudiantil.
La investigación tiene como objetivo generar una nueva estructura digital para la instituciones que imparten conocimiento, considerando a su vez que blockchain tiene la capacidad de revolucionar la forma en que trabajan los estudiantes, empleados, profesores y sistemas administrativos de las academias.
De esta manera, la Comisión Europea plantea que DLT podría impactar principalmente en el sistema de certificados educativos, permitiendo una mayor organización y actualización a tiempo real:
La tecnología Blockchain es ideal como una nueva infraestructura para asegurar, compartir y verificar logros de aprendizaje (Smolenski, 2016). En el caso de las certificaciones, una cadena de bloques puede mantener una lista del emisor y el receptor de cada certificado, junto con el documento firma (hash) en una base de datos pública (la cadena de bloques) que se almacena de forma idéntica en miles de computadoras en todo el mundo.
Comisión Europea.
La investigación también destacó que blockchain podría cambiar la manera en que se organiza la documentación educativa, cualificando y cuantificando dicha información. Las tecnologías de contabilidad distribuida también permitirían verificar la información al momento, crear estructuras para el manejo de una gran cantidad de datos e incluso pueden facilitar los pagos de algunas instituciones por medio de las criptomonedas.
La investigación brindó la información necesaria para que la comunidad europea pueda activar los mecanismos que desarrollen nuevas oportunidades para blockchain en esta área. De esta manera, el reporte se centró en los diversos casos de uso y beneficios claves que tiene DLT para ofrecer, así como en los retos que presentan esta herramienta a largo plazo.
La Comisión Europea también basó todas estas observaciones reflexionando sobre las diversas iniciativas académicas a nivel mundial que involucran a blockchain. La mayoría de estos proyectos aún están en su fase piloto, mas han representado un poderoso avance institucional del ecosistema con representación en La Universidad de Nicosia, la Universidad Abierta de Reino Unido y el Instituto Tecnológico de Massachusetts.
No obstante, aunque el pronostico es alentador, el ente legislativo europeo resaltó que todavía es muy pronto para dar un último veredicto sobre las soluciones DLT, en vista de que las mismas están en pleno desarrollo y pasará un largo tiempo hasta que consigan alcanzar su maduración. Esta realidad no descarta que la unión europea pueda promover la investigación académica sobre la tecnologías de contabilidad distribuida.