Un abogado fue encarcelado por intentar vender información sensible acerca de una operación de inspección encubierta del gobierno de Estados Unidos contra una empresa de California. El sujeto exigió el pago en bitcoin debido a la dificultad para su rastreo.
Se trata de Jeffrey Wertkin, quien estaba asociado al prestigioso bufete Akin Gump ubicado en Washington desde el mes de abril del año pasado. El sujeto además trabajó en la División Civil del Departamento de Justicia, específicamente en el área dedicada a este tipo de delitos, realizando hasta 20 operaciones contra fraudes.
Wertkin pretendía vender una demanda que estaba siendo procesada por la justicia americana a la empresa investigada, y para ello exigió el pago de 310.000 dólares en Bitcoin. El abogado fue arrestado el pasado 31 de enero, pero solo esta semana se conocieron los cargos contra él.
La trama del delito
En noviembre le dejó una nota de voz a un empleado de una empresa de seguridad tecnológica ubicada en Sunnyvale, California, alegando que contra la firma existía una demanda amparada en la Ley de Reclamaciones Falsas por irregularidades en torno al pago de impuestos de la empresa.
Cuando el trabajador contactó a Wertkin, éste, dándole un nombre falso, le aseguró que podía hacerle llegar la primera página del informe oficial, como evidencia de que efectivamente tenía todo el material.
Según el recurso que pesa en su contra en la Corte Distrital de Carolina del Norte, Wertkin habría solicitado una comisión por la ‘consulta’ del expediente. El valor de los documentos que el abogado intentaba vender radica en que, mientras el proceso de averiguaciones no se cierre definitivamente, el gobierno de Estados Unidos tiene derecho a investigar el recurso sin notificar a la empresa, lo que pone en riesgo a las empresas de procesos de fiscalización mucho más rigurosos, para recabar mayores pruebas para justificar algún proceso posterior.
Además, Wertkin habría expresado el interés que tendría la empresa en acceder a esta información a fin de que la investigación no llegara a mayores, e incluso mencionó que el gobierno estadounidense podría estar investigando el caso, revelando información clasificada sobre los procesos que realiza el gobierno norteamericano. A cambio, exigió 300.000 dólares, aunque unos días antes del encuentro, decidió aumentar 10.000 dólares al monto, para cubrir gastos asociados a transporte y otros.
Arrestado con disfraz y peluca
El trabajador de la empresa californiana aceptó grabar las llamadas para que el FBI pudiera recabar suficientes evidencias para la causa contra Wertkin. El encuentro quedó pautado en el lobby del hotel Hilton Garden Inn, ubicado en Cupertino, California, a finales de enero.
El abogado acordó encontrarse con un compañero del primer trabajador al que contactó y que realmente era el agente del FBI, William Scanlon. Wertkin llegó luciendo un disfraz -peluca incluida-, y fue directamente al lugar donde había quedado en encontrarse con el agente, quien lo arrestó.